“(…) La interpretación de estas piezas nos capta por lo que tiene de personal, sincera y verdadera. Las enormes dificultades se allanan por la suficiencia técnica y, así, puede brotar la esencia de esta música inefable y se hace posible el fraseo libre, poético y delectable, con momentos tan especialmente bellos como la copla (en trascendido aire de jota andaluza) de Almería.”